¿Qué ventajas tienen las estufas de parafina?
Cuando llega el invierno y las temperaturas bajan, como a todos, nos gusta sentirnos a gusto en nuestro hogar. Para disfrutar de una temperatura agradable mientras te relajas en tu sofá o mientras celebras una fiesta con familiares o amigos. Por eso, existen diferentes sistemas de calefacción que lo posibilitan. Muchos hogares disponen de la instalación de la calefacción. Otros, en cambio, no. Y tienen que decidir comprar otros sistemas para climatizar las estancias de su casa. Y ahí, es donde entran en juego las estufas.
Las hay de diferentes tipos, aunque las estufas eléctricas suelen ganar adeptos por su rapidez en calentar los espacios del hogar. Aunque el problema viene cuando llega la factura de consumo eléctrico… ¡Cuánto consumen! Tranquilidad, que no cunda el pánico, que para ello llega una opción más económica e igual de rápida: las estufas de parafina.
¿Conocías este tipo de estufas? ¿No? Pues no te preocupes, que te lo explicamos. Se trata de una estufa que funciona con la parafina, un combustible líquido que procede del petróleo y que se introduce en un depósito que lleva la estufa.
¿Quieres conocer más sobre ellas? Sus características, sus tipologías, ¿cómo funciona o que ventajas tienen las estufas de parafina? Pues, continúa leyendo el artículo.
¿Por qué elegir una estufa de parafina?
Una de las razones por las que escoger estas estufas es que es un sistema rápido, limpio y sin ruido. La parafina se introduce en el depósito de la estufa hasta que en unos minutos y sin emisión de humos podremos notar cómo el calor entra rápidamente en nuestra estancia del hogar. Además, la parafina que consumen estas estufas a la hora no supera los 0,30 litros. Y este combustible en formato de 20 litros cuesta unos 40-50 euros, con lo que el consumo es menor que una estufa eléctrica y su precio más económico para nuestro bolsillo.
Calientan rápido, de forma limpia y silenciosa y suponen un ahorro en tu factura. Pero no es la única característica interesante. Las estufas de parafina no necesitan instalación. Y te preguntarás, ¿sin instalación? Sí, simplemente, como se ha comentado, necesitarás ir rellenando el depósito con parafina, hasta que se empape la mecha, darle a un botón para que pueda bombear, esperar a que la llama prenda y presionar el botón de encendido.
Así, como vemos, se trata de una estufa sencilla que aporta más beneficios. La comodidad de mover la estufa a diferentes estancias y que necesita poco mantenimiento. Si bien, lo único que tendrás que hacer será cuidar o cambiar la mecha. Algo que también, te contamos.
Por otro lado, aunque no están recomendadas para dormitorios y espacios sin mucha ventilación por el C02 que liberan, disponen de un sistema de seguridad que detecta el CO2 del ambiente para mayor prevención. Aun así, la rápida propagación del calor hace que esté indicado para estancias grandes como salones y comedores.
Ahora bien, ¿cuál es la mejor estufa de parafina? Eso dependerá de tu situación y tus necesidades. Y de los beneficios que aportan los dos tipos de estufas de parafina que existen. ¡Veámoslos!
Tipos de estufa de parafina
Estufas de parafina de mecha: comodidad
La estufa de parafina de mecha dispone de una característica muy práctica. Es muy cómoda, ya que no necesita ningún tipo de instalación ni tener acceso a la corriente. Si no dispones de ella en la estancia que quieres climatizar, ésta es una buena opción. Además de práctica, es sencilla. Y de fácil movilidad. Pero también, disponen de una autonomía de hasta 15 horas.
Lo que hay que tener en cuenta es lo siguiente: la primera vez que la uses tendrás que esperar a que se encienda una media hora. Por seguridad y para que la mecha se empape bien de parafina. Como decimos, sólo la primera vez. Después, tendrás calor inmediatamente cuando la enciendas.
¿Qué recomendaciones tengo que saber de ésta tipología? Pues lo único que necesitas saber es dónde colocarla. Están pensadas para sitios con mucha ventilación y se recomienda no usarlas en dormitorios.
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Estufas de parafina electrónicas: más potencia, menos consumo
¿Qué ventajas tienen las estufas de parafina electrónica? A diferencia de las estufas de mecha tienen más potencia. Y más eficiencia en su consumo. Pues tienen uno menor, lo que las hace una buena opción para el ahorro.
Además, te da la opción de poner la temperatura que quieras por un tiempo concreto, tener un control electrónico del quemador y más seguridad en su acceso. De hecho, puede haber modelos que también tengan sistemas de seguridad para con los niños.
Lo que pasa es que a diferencia de la otra tipología, necesitan de enchufe. Aun así, suelen ser igual de transportables que las anteriores, aunque precises de un enchufe en la estancia.
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¿Qué mantenimiento necesitan?
Ya hemos dicho que las estufas de parafina necesitan poco mantenimiento. Y es cierto, pero hay que tener unos mínimos cuidados. Básicamente, porque la mecha de las estufas no funcionan para siempre. Y a veces, hay que cambiarlas. ¿Cómo cambiar la mecha de las estufas de parafina?
Para ello, tendrás que asegurarte de tener la estufa apagada hasta notar que esté fría. La demora puede llegar a los 30 minutos. Pásale un trapo para quitar el polvo.
Después, con sumo cuidado, tendrás que ir abriendo poco a poco la carcasa de la estufa. Necesitarás destornilladores. Luego, tendrás que acceder a la carcasa donde se encuentra la mecha y sacarla. Tendrás que usar el botón de control de la estufa. Es necesario hacer esto para poder acceder al portamechas.
Cuando ya accedas al portamechas, retira la mecha vieja y cámbiala por una nueva. Y vuelve a montar todo otra vez. Igualmente, recomendamos mirar siempre las instrucciones o el manual que acompaña la estufa, donde encontrarás las especificaciones necesarias de tu estufa y dónde se localiza cada parte.
A veces, para intentar hacer que la estufa de parafina funcione más tiempo, es recomendable dejar a cero el depósito de parafina cuando acaba el invierno. Es decir, dejar que toda la parafina que quede se vaya quemando hasta que la estufa pare.
Consejos de seguridad
A continuación, os hacemos un listado con precauciones que hay que tener cuando se dispone de una estufa de parafina:
- Ventilar el exterior si se detecta volumen considerable de C02.
- Evitar colocar estufas de parafina en espacios de menos de 10m2. Se detectaría mucho C02.
- Acotar una distancia de seguridad ante objetos inflamables.
- Apagar la estufa antes de irte a dormir.
- Mantener fuera del alcance de los niños.
¿Ya te has decidido por una estufa de parafina? ¿Tienes alguna duda más? Te informaremos encantados. ¡Contáctanos!
